Diferencia entre eficiencia y eficacia en el mundo laboral
La eficiencia y la eficacia son conceptos similares pero que tienen algunas diferencias. En este artículo nuestros expertos en empresas y gestión de negocios te cuentan cuáles son las principales diferencias entre eficiencia y eficacia en el mundo laboral.
Diferencia entre eficiencia y eficacia en el mundo laboral
En la vida en general, cuando se quiere valorar el trabajo de cualquier tipo de persona u organización se suelen usar los términos eficacia y eficiencia pero cabe reseñar que ambas nociones no son lo mismo. Además, sobre todo en el mundo laboral, resulta fundamental diferenciar entre la eficiencia y la eficacia para poder establecer unas líneas de trabajo y de actuación aplicables a todos los trabajadores y grupos de trabajo.
No es lo mismo ser un trabajador eficaz que ser un trabajador eficiente, aunque pueda parecernos lo mismo. Un trabajador eficaz será aquel capaz de lograr unos resultados concretos con éxito sin tener en cuenta los recursos que necesite para lograrlo mientras que un trabajador eficiente será aquel que podrá lograr sus objetivos con el mínimo de recursos. Por ejemplo, un trabajador eficaz sería aquel que tuviera que fabricar 10 camisetas en un día y cumpliera con su trabajo tardando 10 horas mientras que un trabajador eficiente también cumpliría con los objetivos pero lo haría en 8 horas al optimizar al máximo todos sus recursos y capacidades.
Sin duda los dos trabajadores cumplen con los objetivos pero el eficiente necesita muchos menos recursos para lograrlo (en este caso dos oras menos del recurso tiempo), con lo que sin duda, si sus superiores tuvieran que quedarse con uno del los dos siempre elegirían al eficiente.
La diferencia es por tanto sencilla y la dirección sólo va hacia un lado porque las personas eficientes serán también eficaces sin lugar a dudas, pero las personas eficaces pueden no ser eficientes al no optimizar al máximo todos los recursos de los que disponen. Esto quiere decir que si para la misma tarea uno de los trabajadores resulta más eficiente, se deducirá que esta tarea es óptima para él y por tanto, para la empresa si hablamos de costes, será mucho más interesante disponer de trabajadores productivos y eficientes que sean capaces de hacer las tareas que les son encomendadas de forma eficaz, pero además con el menor número de recursos que les sea posible.
Para las empresas resulta fundamental por tanto el trabajar para convertir a los trabajadores eficaces en trabajadores eficientes mediante una formación adecuada que les ayude a optimizar los recursos.
Ser eficaz es por tanto el conseguir todo tipo de metas y de objetivos que se propongan desde la empresa pero ser eficiente, además de lograr las metas pasa por lograrlo de forma óptima gastando menos tiempo, menos recursos, menos dinero o menos de cualquier tipo de extra que suponga para las empresas el que éstas puedan ahorrarse los costes extra.
En algunos casos, las empresas incluso seleccionarán a trabajadores realmente eficientes obteniendo una rentabilidad muy buena por ellos ya que un buen profesional eficaz y eficiente puede ser capaz de realizar su trabajo produciendo a la empresa unos beneficios mensuales que incluso pueden llegar a ser superiores a su sueldo fijo, con lo que sin duda estos profesionales dentro del mundo laboral se convertirán en intocables para las empresas y se asegurarán un puesto de por vida en la organización. Así, primero que nada resulta fundamental ser eficaces para después poder dar el paso hacia la eficiencia dentro de una empresa o en el mundo laboral.
Las empresas y organizaciones que quieran conseguir mejorar su entorno laboral y los resultados de sus negocios a nivel económico tienen que apostar primero que nada porque sus trabajadores sean eficaces. Para ello pueden servirse de cursos formativos, captación de talento y de un gran número de técnicas diferentes para conseguir a los mejores profesionales en todas las posiciones jerárquicas de la empresa. Cuando la plantilla ya sea totalmente eficaz llegará el momento de trabajar para conseguir que sean eficientes y puedan optimizar todos los recursos de la empresa para obtener muchos más beneficios de forma más sencilla. Sin duda esto resulta fundamental para todas las empresas que quieran posicionarse con éxito en el mercado ya que supondrá que se reduzcan los costes de todos los procesos de creación de productos o de prestación de servicios.
Pero además, de forma indirecta el conseguir que una organización o empresa en el mundo laboral sea a la vez eficaz y eficiente y sobre todo que todos sus trabajadores lo sean repercutirá también sobre el capital humano, ya que éstos se sentirán mucho más valorados, verán que están trabajando de forma mucho más eficiente y que la empresa prospera gracias a ellos y los directivos los valorarán de forma óptima con lo que tendrán muchas más posibilidades de ascenso y de continuar con una próspera vida laboral dentro de una empresa en la que se habrán convertido en piezas indispensables.